3.11.18

Cuerpo

A veces cuando estoy triste siento como mis manos y los pies pierden sangre y se enfrían de a poco, pero a la vez se vuelven pesados y dificultosos. 
Antes pasaba sólo en la cama, ahora pasa también si estoy sentada, no sé si de pie. 
Pasa cuando creo escuchar a los vecinos disfrutar.